La Federación Española de Fútbol (RFEF) enfrenta acusaciones de haber modificado la puntuación en el proceso de selección de sedes para el Mundial 2030, lo que habría llevado a la exclusión del estadio municipal de Balaídos, en Vigo.
Según documentos revelados por el diario El Mundo, en la primera evaluación Balaídos obtuvo una puntuación de 10,2004, superando al estadio de Anoeta en San Sebastián (10,1226). Sin embargo, dos días después, un nuevo listado presentado por la Federación mostró a Anoeta con 10,6026 puntos, ascendiendo en la clasificación y desplazando al recinto vigués.
Reacciones en Vigo
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, calificó la situación de “gravísima” y denunció “oscurantismo” en el proceso de selección. En una conferencia de prensa, exigió explicaciones inmediatas al presidente de la RFEF, Rafael Louzán, y criticó que se haya alterado el criterio técnico sin que se conozca quién realizó los cambios.
Caballero recordó que el presidente del Consejo Superior de Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes, había respaldado la candidatura de Vigo como sede por sus “méritos objetivos”. Además, señaló que lleva casi un año denunciando la “injusta” exclusión del estadio Balaídos.
Con esta denuncia, se abre un nuevo foco de controversia en la organización del Mundial 2030, que tendrá a España como uno de los países anfitriones.
